Debido a que los síntomas del síndrome de Sjögren se desarrollan gradualmente y son similares a los de otras enfermedades, toma tiempo diagnosticarlo. Es posible que una persona consulte con varios médicos, y cualquiera de ellos diagnostique y trate la enfermedad. Entre estos médicos se encuentran:
- Reumatólogo: médicos especializados en las enfermedades de las articulaciones, los músculos y los huesos. Por lo general, este profesional coordinará el tratamiento con los especialistas que se necesite.
- Médicos con especialidad en medicina interna.
- Oftalmólogo: médicos especializados en el cuidado de los ojos.
- Otorrinolaringólogo: médicos especializados en el cuidado del oído, la nariz y la garganta.
Los dentistas también pueden derivar a un especialista si detectan el síntoma de la «boca seca».